Deshabituación psicológica de las adicciones
¿De qué hablamos con la palabra deshabituación?
En el problema de las adicciones, se lleva muchos años investigando e intentando dar respuesta, solución y tratamiento a un problema que cada vez padecen más personas, sufriendo sus consecuencias. Su vulnerabilidad, afecta a distintas áreas del ser humano, y sus consecuencias suelen ser psicológicas, emocionales, físicas, económicas, laborales, familiares y un largo etcétera.
Los nuevos avances en neurociencia y en neuro-imagen nos han permitido observar el poder adictivo de las sustancias desde un punto de vista biológico. Se sabe, que algunas sustancias tienen la capacidad de general adicción.
Incluso algunos comportamientos, en lo que se llama adicciones conductuales como el juego patológico, se puede observar cómo se altera algunas funciones del cerebro, provocando una modificación respecto a la liberación de algunos neurotransmisores. Todo esto explicaría la adicción física, y los efectos adversos y molestos que sufre la persona en los síndromes de abstinencia hasta que el organismo recupera su homeostasis.
Esta dimensión de la adicción, la adicción física, quizá sea la más fácil de solventar. Ya que sería cuestión de tiempo de abstinencia, y en la mayoría de las adicciones no mucho tiempo. Pero existe la dimensión psicológica de las adicciones que es más perdurable en el tiempo y que quizá pueda estar detrás de la recaída de personas que llevaban mucho tiempo sin consumir.
La dimensión psicológica de las adicciones está unida a muchas cosas, es multicausal, como puede ser la forma de afrontar o huir de problemas, de divertirse, de premiarse, de relacionarse y de un sinfín de estímulos y rituales vinculados a la adicción.
Como puedes intuir, no existe ningún medicamento que solucione todo este condicionamiento. Por ello podemos imaginar, personas que podrían aislarse en un entorno idílico en el que no exista su adicción, pronto de vuelta a su entorno, a su cotidianidad, volvería la adicción. Una persona, puede estar un tiempo en una “isla” para dejar de consumir, ¿cuánto tiempo estaría esa persona sin consumir cuando volviera a su ciudad, a su realidad? Porque no es cuestión de tiempo sin consumir, es cuestión de descubrimiento, aceptación y cambio. Por ello hablamos de deshabituación psicológica de las adicciones.
Freedom propone un proceso psicoterapéutico divido en tres fases, donde te acompañará en tus primeros pasos de abstinencia, en el descubrimiento del condicionamiento psicológico de tu adicción y en tu esfuerzo y capacidad para realizar cambios.